En los últimos años los azulejos para cocinas han tomado protagonismo a la hora de reformar esta parte de la casa. Cada vez con más frecuencia nos atrevemos con colores atrevidos que nos aportan un toque moderno y diferente a nuestras cocinas, aunque también tenemos la opción de elegir colores neutros para ambientes clásicos, o ambientes rústicos con texturas naturales. Ya hemos visto la importancia de aspectos como la elección de muebles, distribución de los mismos, encimeras y cortinas, y ahora veremos las posibilidades que ofrece el mercado en cuanto a los azulejos de nuestra cocina.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que clase de cocina queremos tener, es decir, que clase de muebles vamos a colocar, ya
que es muy importante una sincronización entre los muebles y los azulejos. Por ejemplo, en una cocina moderna lo recomendable o más utilizado es colocar los azulejos grandes en tonos vivos o inclusos satinados mientras que si queremos una cocina rustica optaremos por azulejos de colores más neutros colocados en forma de rombo. La elección de los azulejos para cocina tiene que ir en concordancia con el estilo de muebles, encimera, suelo e incluso electrodomésticos.
Existen principalmente cuatro grupos de azulejos para la cocina:
Azulejos cerámicos
Los más utilizados por su relación calidad-precio. No tienen nada de porosidad por lo que son muy fáciles de limpiar. Actualmente existe en el mercado una amplia variedad de colores e incluso de tamaños, aunque la tendencia en los últimos años es de colocar azulejos más bien grandes.
Azulejos rectificados
Son aquellos azulejos terminados de forma diferente en los que los cantos están cortados en ángulo de 90º. Con ello se consigue de forma visual la desaparición de las juntas. Se unas sobre todo en cocinas modernas, y predominan los azulejos rectificados grandes en tonos blancos o cremas, o en colores oscuros (negros, grises).
Gresite
Consiste en un mosaico de piezas pequeñas y cuadradas (unos 2 o 3 cm). Es otra opción para las cocinas actuales, ya que aportan un toque diferente mediante la combinación de colores y formas. Se recomiendan para cocinas amplias, a las que aportan gran colorido. Su gran aporte estético tiene como inconveniente la acumulación de suciedad entre las muchas juntas que resultan de su colocación.
Gres
Podemos encontrar azulejos de gres en dos variedades: Normal (esmaltado) o porcelánico (mate). Esta gama de azulejos para cocinas presenta como principal ventaja que ofrece una amplia variedad de colores, tamaños y texturas, lo que a buen seguro nos permitirá encontrar la combinación perfecta para nuestro estilo de cocina. Otra ventaja es que se trata de un material duro y resistente a productos químicos, lo que facilita su limpieza.
Además de disponer de multitud de materiales, como ya hemos visto, el mercado ofrece innumerables posibilidades en cuantos a colores (neutros, cálidos, fuertes), texturas (lisos, imitaciones de texturas naturales como madera o agua, rústicos), formas (cuadrados, rectangulares) y tamaños, lo que nos proporciona la posibilidad de combinar múltiples opciones. El estilo de nuestra cocina y nuestra imaginación determinarán finalmente la elección que hará de nuestro espacio favorito un lugar armónico y agradable.